El portero Rafael Romo (centro) le atajó un penal a Cristian Nazarith, en la última jugada del partido, y llevó a la Vinotinto al hexagonal final del Sudamericano Sub-20 de Venezuela-2009, al empatar 1-1, anoche, en la quinta y última fecha del grupo A, con Colombia, para terminar como el puntero de su zona.
Los criollos pasaron primeros del grupo A (por diferencia de goles) y se enfrentarán con los mismos neogranadinos el sábado, en la apertura de la ronda definitiva. El once cafetero logró su boleto gracias a un sorteo, debido a que culminó igualado en resultados y dianas con Ecuador, eliminado.
José Salomón Rondón, al minuto 42, había encendido el tanteador para los dirigidos por César Farías, luego de un centro desde la derecha de Pablo Camacho. La salida incompleta del portero Camilo Vargas dejó la pelota en los pies del atacante criollo, que sólo tuvo que disparar.
La Vinotinto se encerró y regaló el control de la pelota a los neogranadinos. Al 58, el austral Enrique Osses (de un desempeño brillante, el mejor de árbitro alguno en el torneo) anuló un gol cafetero por fuera de juego. Hasta que la defensa no pudo más y el colombiano Cristian Mejía sacó una falta dentro del área, cometida por Carlos Salazar, al 63. Nazarith cobró a la derecha de Romo y el de Turén se fue al lado contrario. El primer round se lo llevó el cafetero.
Con Venezuela sufriendo la presión tricolor, al segundo minuto del tiempo de reposición Mejía logró otra falta, esta vez realizada por Mauricio Parra. Crispación en Maturín y la fe de muchos se quebró. Pero no la de Romo. Se paró en la línea de cal, se adelantó cuando Nazarith corrió para cobrar y se lanzó a su izquierda. El remate con ubicación lo detuvo. Romo se tomó su venganza final y se desató la locura en el estadio Monumental: ¡pasó Venezuela!
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